Existe una parábola que dice que tres ciegos encontraron un elefante. “Es una cosa grande y áspera, ancha y extensa como una alfombra”, dijo el primero, palpando una oreja. El segundo, palpando la trompa, exclamó: “Yo tengo la verdad. Es un tubo recto y hueco”. Y el tercero, palpando una pata delantera, señaló: “Es poderoso y firme como una columna”.
He encontrado este episodio varias veces en mi vida, muy pocas veces me he dado cuenta de inmediato, otras ha pasado un tiempo para darme cuenta, y supongo que la mayoría de las veces no me he dado cuenta en absoluto.
Una de las últimas me llegó en forma de cadena, dice que son las once duras reglas de Bill Gates (La realidad es que las once reglas son sacadas de un libro llamado “Dumbing Down our Kids” y el autor de ellas es Charles Sykes lo que me parece más real) que resumen un discurso hecho, supuestamente, a estudiantes y padres de familia, para los que no le han llegado todavía aca se las dejo y sigo comentando más abajo.
Regla Uno- La vida no es justa, acostúmbrate a ello.
Regla Dos- Al mundo no le importará tu autoestima. El mundo esperará que logres algo, independientemente de que te sientas bien o no contigo mismo.
Regla Tres- No ganarás US$5.000 mensuales justo después de haber salido de la preparatoria y no serás un vicepresidente hasta que con tu esfuerzo te hayas ganado ambos logros.
Regla Cuatro- Si piensas que tu profesor es duro, espera a que tengas un jefe. Ese sí que no tendrá vocación de enseñanza ni la paciencia requerida.
Regla Cinco- Dedicarse a voltear hamburguesas no te quita dignidad. Tus abuelos tenían una palabra diferente para describirlo: Le llamaban oportunidad.
Regla Seis- Si metes la pata, no es culpa de tus padres, así que no lloriquees por tus errores; aprende de ellos.
Regla Siete- Antes de que nacieras, tus padres no eran tan aburridos como son ahora. Ellos empezaron a serlo por pagar tus cuentas, limpiar tu ropa y escucharte hablar acerca de la nueva onda en la que estabas. Así que antes de emprender tu lucha por las selvas vírgenes contaminadas por la generación de tus padres, inicia el camino limpiando las cosas de tu propia vida, empezando por tu habitación.
Regla Ocho- En la escuela puede haberse eliminado la diferencia entre ganadores y perdedores, pero en la vida real no. En algunas escuelas ya no se pierden años lectivos y te dan las oportunidades que necesites para encontrar la respuesta correcta en tus exámenes y para que tus tareas sean cada vez más fáciles. Eso no tiene ninguna semejanza con la vida real.
Regla Nueve- La vida no se divide en semestres. No tendrás vacaciones de verano largas en lugares lejanos y muy pocos jefes se interesarán en ayudarte a que te encuentres a tí mismo. Todo esto tendrás que hacerlo en tu tiempo libre.
Regla Diez- La televisión no es la vida diaria. En la vida cotidiana, la gente de verdad tiene que salir del café de la película para irse a trabajar.
Regla Once- Sé amable con los "NERDS" (los más aplicados de tu clase). Existen muchas probabilidades de que termines trabajando para uno de ellos.
Las reglas son reales, como tan real es la oreja del elefante, el problema es caer en la tentación de creer que la oreja es el elefante completo.
cuando puse este texto a buscar en google y (obviamente apareció muchas veces) me puse a leer los comentarios que ponía la gente al respecto. Los más interesantes surgieron de un foro de padres en el cual lo habían copiado sin la introducción ni la conclusión por lo que no había ninguna alusión de quien lo había escrito y en que contexto (o sea como lo transcribí yo ahora pero sin ni siquiera mencionar a Bill Gates).
A ellos no les gustaron para nada estas reglas, uno pregunto quien las había escrito, y otro le contesto "seguramente un NERD por la forma de las mismas y como los defiende" (casualmente Bill Gates se considera un NERD).
Otro dijo que eran las perfectas reglas para un perfecto empleado de Mc Donalds, y que el no quería un hijo que aspirara a ser un empleado de Mc. Donalds.
Los que esos padres querían de sus hijos se describiría algo así como:
Regla Uno- La vida no es justa, acostúmbrate a ello. La vida no es justa, lucha para que lo sea.
Regla Dos- Al mundo no le importará tu autoestima. El mundo esperará que logres algo, independientemente de que te sientas bien o no contigo mismo. No tienes ninguna obligación de demostrarle nada al mundo, si lo haces hazlo de generoso que eres.
Regla Tres- No ganarás US$5.000 mensuales justo después de haber salido de la preparatoria y no serás un vicepresidente hasta que con tu esfuerzo te hayas ganado ambos logros. No bases tu vida solo en ganar dinero o será una vida muy vacía.
Regla Cuatro- Si piensas que tu profesor es duro, espera a que tengas un jefe. Ese sí que no tendrá vocación de enseñanza ni la paciencia requerida. Es lógico los jefes no se dedican a enseñar, generalmente lo hacen los verdaderos compañeros de trabajo, se un buen verdadero compañero.
Regla Cinco- Dedicarse a voltear hamburguesas no te quita dignidad. Tus abuelos tenían una palabra diferente para describirlo: Le llamaban oportunidad. Si alguien me explica que quiere decir la frase voltear hamburguesas se lo agradecería, debe ser algún frase figurativa o una mala traducción.
Regla Seis- Si metes la pata, no es culpa de tus padres, así que no lloriquees por tus errores; aprende de ellos. Aprender de lo errores es la manera básica de aprender, llora por tus errores (es bueno llorar, pero no es bueno pasarte la vida llorando) y luego aprende.
Regla Siete- Antes de que nacieras, tus padres no eran tan aburridos como son ahora. Ellos empezaron a serlo por pagar tus cuentas, limpiar tu ropa y escucharte hablar acerca de la nueva onda en la que estabas. Así que antes de emprender tu lucha por las selvas vírgenes contaminadas por la generación de tus padres, inicia el camino limpiando las cosas de tu propia vida, empezando por tu habitación. Esto es bastante anecdótico, sin embargo la manera de hacer aburridos a los muchachos y sacarlos de la onda, es hacerlos pagar sus cuentas, he notado que se vuelven un poco más tacaños a la hora de escoger los productos a comprar, aunque algunos realmente no tienen cura :-D. La vida en esto es inflexible, tarde o temprano se volverán aburridos o peor querrán mantenerse en la onda cual eternos adolescentes y sufrirán horrores cada vez que los niños y adolescentes les digan señor y señora cuando les hablen (¿se acuerdan de ese momento?). Consejo: enseñenles a limpiar el cuarto y las terribles y dolorosas consecuencias de no hacerlo (y no me refiero al mal olor que se acostumbran rápido a ello), como no salir, ni usar la computadora, ni ver tele (es que los malos olores afectan los componetes electrónicos de última generación :-D).
Regla Ocho- En la escuela puede haberse eliminado la diferencia entre ganadores y perdedores, pero en la vida real no. En algunas escuelas ya no se pierden años lectivos y te dan las oportunidades que necesites para encontrar la respuesta correcta en tus exámenes y para que tus tareas sean cada vez más fáciles. Eso no tiene ninguna semejanza con la vida real. Como docente que soy, es algo que se padece mucho, el problema es que la escuela es para aprender, la pregunta es que queremos enseñar, y que queremos aprender, esta regla tiene una onda Mc Donalds, ¿Qué es un ganador y que es un perdedor? Después de todo muchos "ganadores (de promedio 10)" fueron grandes perdedores en la vida real y muchos expulsados "académicamente" encabezan las listas de los más ricos del mundo (y el primero de todos es un tal Bill Gates que abandonó la Universidad). Sobre la onda Mc. Donalds me refiero a que el mejor empleado tendrá su foto en en la pared de honor. Sin embargo coincido con el espíritu de la regla, todo lo que valores más es lo que has conseguido con esfuerzo, en otras palabras, cuanto más esfuerzo te provoque algo, más lo valoraras. Y sobre todo que nada en la vida se consigue sin esfuerzo.
Regla Nueve- La vida no se divide en semestres. No tendrás vacaciones de verano largas en lugares lejanos y muy pocos jefes se interesarán en ayudarte a que te encuentres a tí mismo. Todo esto tendrás que hacerlo en tu tiempo libre. Entonces aprovecha esa parte de la vida porque no se va a repetir. De todas maneras la revolución de software más importante de esta época (Software Libre) se hizo en el tiempo libre de miles de personas.
Regla Diez- La televisión no es la vida diaria. En la vida cotidiana, la gente de verdad tiene que salir del café de la película para irse a trabajar. No confíes en la televisión, no confíes en estas reglas, cultívate un espíritu crítico.
Regla Once- Sé amable con los "NERDS" (los más aplicados de tu clase). Existen muchas probabilidades de que termines trabajando para uno de ellos. Se amable con todas las personas, nunca sabras cuando necesites su ayuda, sea quien sea.
miércoles, 16 de enero de 2008
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